-Um.. No es necesario.
-Si lo es.
-Es usted muy amable, pero..
-No, puedo ser cualquier cosa, menos amable. De hecho tengo la obligación profesional de ser malevolente
-Entonces deberías cambiar de trabajo.
-No puedo.
-Si puedes.
-No, no, está en mi sangre. Una vez fuimos guerreros. Ahora sólo queda la urgencia. Una sombra asesina cruza por mi alma. Asi que.. (suspiro)
-Entonces debí dejar que te ahogaras.
-Si, debiste. Cerdo, si usaras mi collar, me harías un gran honor"
Babe, Pig in the city. George Miller. 1998. Universal movies
El último año de la educación básica avanza. Termina el primer trimestre. Es la época de la evaluación normalizada obligatoria para el acceso a la educación superior. Gran folio desplegable. Secciones según las áreas del conocimiento. Cuadernillo de respuestas. Selección mçultiple. Rellene completamente el óvalo con el lápiz de número dos. Tenga a mano su documento de identificación. El camión blindado que atiende los transportes de dinero del banco ha venido a recoger los cuadernillos. Los resultados tardan algunas semanas. La coordinación los entrega en sobres cerrados. Un instituto de educación pública, de presupuesto exiguo y maestros sobrecargados de alumnos, puede generalmente aspirar a resultados pobres. Sin embargo el altavoz pasa un mensaje de felicitación. El puntaje mayor de toda la provincia, en nuestro plantel. Motivo de orgullo. En alto el nombre de la institución. Mejores subvenciones para nuestro presupuesto. Buena publicidad. Evento en la plaza de las banderas. Himno nacional. Todos de pie: El señor rector. Una medalla de hojalata dorada con una inscripción. Una beca para una carrera universitaria. Al parecer, las pruebas generales de conocimientos tienen más importancia de lo que pudiera atribuírseles dada su apariencia anodina. Las entidades parentales lucen un poco perplejas. Siempre creímos que me quedaría en el campo, para continuar el trabajo del Padre. Nunca se habían planteado la posibilidad de una carrera universitaria. Nadie en nuestra familia ha ido a una universidad. La Madre dice que estaría muy feliz si estudiase medicina y llegara a ser un doctor.
La institución ha decidido declarar como celebración, un día libre para todos, con una excursión para nuestro grupo al parque acuático de la gran ciudad del valle del sur. Esse toma el asiento a mi lado en el autobús. Alto, moreno, enormes ojos brillantes, cabellos ensortijados. Siempre ha sido amable conmigo, aún sin haberle dado motivos para ello. En las clases de arte muchas veces he pintado su retrato con las acuarelas que me prestaba la maestra. Su piel aterciopelada. El contorno curváceo de sus labios. El diminuto hoyuelo de sus mejillas al sonreír. El parque acuático es una enorme sucesión de piscinas con sus toboganes correspondientes. Nunca había estado en una piscina antes. La piscina mayor simula el oleaje del mar, por medio de un mecanismo que genera perturbaciones periódicas del agua. El oleaje artificial empuja, imperceptiblemente. El cuerpo de Esse, cubierto por su pequeño bañador, brilla húmedo bajo el sol. Como un pez irisado. De pronto, falta el suelo bajo mis pies. No logro sacar la cabeza por encima del nivel del agua. Mis movimientos, como siempre descoordinados, no son eficientes para propulsarme a través del agua. Los niveles de oxígeno decaen. El cuerpo desencadena su respuesta de pánico. El corazón se acelera a su máximo. Todo se oscurece.
-Sabemos bien que no podemos ir todavía. No fué nuestra culpa.
-Te has descuidado. La exoforma es frágil, deberías haberla cuidado mejor. Los Destinos no estarán nada contentos.
-Es verdad. Pedimos perdón por nuestra negligencia.
-De cualquier modo, no puedes ir conmigo por ahora. Tu regreso ya está en curso.
Se abren mis ojos. El rostro de Esse. Sopla dentro de mi boca. Leve sabor a sal de su saliva. Un acceso violento de tos. El cloro quema la garganta. Durante el viaje de regreso, me ha dejado recostar la cabeza en su regazo.
Distorsión de la conciencia. Tinta sobre papel. 2005
"Sentada en un borde de hierba,
juega con las olas,
con la punta del pié
con el pliegue de su vestido.
La toca el rocío.
En el agua,
nació en el agua más límpida
y se ha arrojado al mar,
al mar
donde el amor está"
Celtica. Emma Shapplin.
Etterna. 2002. Ark 21/Universal music
Querido Blackmount, disfruto mucho de tu estilo al escribir. Es una preciosa historia. Y qué peligroso el camino que llevó al protagonista a conocer los labios de Esse, como un ángel que le devolvió la vida. Yo también fui el primero de mi familia en pisar una universidad, después de generaciones y generaciones de campesinos que ni apenas pisaron una escuela primaria. Tomar decisiones tan drásticas así en la vida es difícil, y lo comprendo perfectamente, sobre todo cuando no tenía a nadie cercano que me orientara por un mundo completamente desconocido. Las citas, las imágenes y la música también me gustaron. Besos y un abrazo.
ResponderEliminarmuy estimado Roberto: nos complace sobremanera que te hayan gustado los contenidos. es lo que da sentido a este ejercicio. indudablemente cada decision se ramifica en un arbol interminable de decisiones colaterales y es muchas veces imposible estar seguro de tomar la mejor. a veces solo queda hacer un salto de fe y esperar por lo mejor. mil gracias
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